"¿Qué es ese ruido?"

En una pileta de un club de barrio en el corazón de Capital Federal se encontraba una masa de socios disfrutando de la frescura que brinda el agua mezclada con cloro ante el desafiante sol de enero.
Chapotasos, sambuyidos y conversaciones efímeras se mezclan hasta que a lo lejos se escucha un ruido de risas mezcladas con un grito plagado de adrenalina o mejor dicho paranoia.
El chillido perturbador persiste hasta dominar todo el plano auditivo de la escena, generado que los presentes se miren entre ellos extrañados en torno al acontecimiento.
El sonido cada vez se hace más fuerte y desde el cielo cae una mujer que impacta directo contra el agua muriendo automáticamente con una nota firmada de puño y letra en su bolsillo. Era un suicidio. El verano había terminado de la peor manera.

Che vos si que sos raro eh

- ¿Y Susana en qué anda?

- No se, cortamos.

- Uh, tan lindos que se veían ¿Qué pasó?

- Paso que me encantaba. Me entendía como nadie. Era linda, graciosa, dulce, sarcástica, irónica y única. También me hablaba seguido pero sin ser pesada y en la cama era ideal. Tenía el estilo y carácter perfectos, me hacía sentir como el mejor del mundo. Con ella todo salía bien siempre.

- Y entonces ¿Qué problema hubo?

- Odio sentirme vulnerable.

Infinitas penurias

Francisco apoyó su cabeza contra la fría ventana del tren en una de las mañanas más pausadas y lentas de la historia.
Sus facciones pálidas rara vez cambiaban y la única imagen que denotaban era la de una tristeza incomparable.
De tanto en tanto levantaba su mano izquierda para despeinarse y volverse a acomodar el pelo, sin ningún sentido pero era lo poco que podía hacer para darle locomoción a su inactivo cuerpo.
Todo lo que sucedía a su alrededor poco le importaba, solo lo fastidiaba el sólo hecho de pensar en lo rutinario que se volvía prestarle atención.
En cierto momento, llegó a pensar, que por más que en ciencias exactas haya estado en ese tren solo media hora, parecía que había permanecido allí por una eternidad como si estaría navegando por un eterno océano de vías, gente ensardinada y cada tanto ruidos de barreras.
Deseaba con los dientes rechinando que algo malo suceda, que un auto choque, que una señora se caiga al piso o que simplemente se corte la luz de su vagón. Todos estos sentimientos pesimistas poco tenían que ver con venganza sino que con el hartazgo que padecía.
El final del sufrimiento llegó cuando el tren frenó en la estación de Retiro y ante el hormigueo de seres humanos que eso representa Francisco se bajó del vehículo que ofició de su propio elemento de tortura, para decir:

- Destesto cuando se me queda sin pila el MP3 la re puta madre!

Esas cosas que nunca pude explicar

- ¿Tenés un paquete de galletitas en el cajón?

- Sí, pero están horribles son del año pasado casi.

- ¿Para qué las guardás?

- Me da cosa tirarlas, pero tampoco las voy a comer, entonces las guardo por tiempo indefinido ahí adentro y hago de cuenta que no existen.

Te entiendo, todo bien

- Yo miedo? Experimento una tonelada de pánico casi todos los días, preferentemente de noche, cuando me acuesto a dormir. Igual no te creas que me pienso que soy el único que está asustado, es más, pienso que bastante seguridad tengo en comparación con otros. Me da tanto alivio saber de esos que le tienen miedo a no tener una persona que les mande mensajes de texto las 24 horas del día. O esos que miran con cara de asco lo que no entienden, pero en realidad le tienen un susto bárbaro por el simple hecho de no entenderlo. Sin mencionar a ese grupo de personas que se aferran a creencias pelotudas por el la simple promesa de paz eterna. Te imaginás un mundo con paz eterna? Con quién pelearían? De qué se quejarían? Cómo harán para sentirse bien con ellos mismos?. Por eso cuando estoy asustado me acuerdo de esos, de los que apuntan con un dedo y aprietan con el otro, que no aprendieron a escucharla, que no se animan a abrazarla y que sobre todas las cosas se encierran para no vivirla.

- Te pregunté si querías de jamón y queso o todas de carne, estoy harta de tus planteos Gerardo!

- Si las de jamón y queso tienen tomate no, me da miedo el tomate.

El Amor

- Che mi vida me salió un granito en la espalda mirá!

- Cuando lleguemos a casa te lo reviento y después te hago unos fideitos.

¿Te imaginás presenciar un programa de Eduardo Feinmann que nunca termina?

Fernandito detestaba ir a una escuela católica. Más allá de la burocracia permanente que eso significaba, el joven de 8 años tenía un repelente muy efectivo para las mentiras que la biblia inculca a sus creyentes.
El tema era que Fernandito se reprimía al escuchar lo que para él eran falacias para no meterse en problemas, hasta que un día no lo soporto más y en plena clase de catequesis tuvo que poner el grito en el cielo...


"Es así chicos, el infierno existe, y lo único que puede salvarlos de él es la palabra de Dios. ¿Les gustaría pasar la eternidad en un mar de fuego, castigos físicos y música de rock sonando las 24 horas?" - Dijo el Reverendo Koppper ante un aula repleta de niños inmutados que llevaban la misma ropa, pose y peinado.

Fernandito no se resistió a no contestar la pregunta y respondió: "La verdad que ese infierno resulta muy interesante, pero no es el mio. Para mi el infierno sería tener 40 años y estar un sábado por la noche en mi casa cortando cupones de descuentos para ir al supermercado en la semana. Estar casado con una persona que la actividad más sensual que realiza es coserme los codos de los sacos para que no se me gasten, criar hijos en escuelas como esta y tener un empleo mediocre en el cual sé que me estafan pero voy a tener la patética idea que lo necesito para vivir. Sin contar tener que despertarme temprano todos los domingos por el resto de mi vida para ir a palacios dedicados al robo, asesinato y la mentira, para después tener que manejar hasta la casa de una suegra que me trata mal y que estoy seguro que escupe en el almuerzo que prepara para mi y mi familia. No se olviden de que el entretenimiento más grande de la semana sería ver Tinelli y desear todo un universo inaccesible. Si eso si suena como castigo eterno. ¿Con quién me pongo en contacto para evitarlo? ¿Dios con quién se casó, a qué iglesia fue?".

Los padres de Fernandito actualmente esperan que les aprueben una vacante en una escuela laica.

El dilema generacional

Braulio y Marta estaban sentados en el sillón plastificado con cara de pocos amigos, los dos miraban hacía adelante sin emitir palabra y lo único que se escuchaba de fondo era el sonido del televisor. A juzgar por los forros arriba de la mesa y la indumentaria tirada en el piso, un frustrado acto sexual acababa de ocurrir.

Cuando parecía que los dos finalmente se habían transformado en una pareja de estatuas, Marta rompió el silencio.

- No puedo creer que seas tan histérico, a veces me repugna lo nenita que sos. Crecé ya tenés 20 años, no sos más un quinceañero!

Braulio se limitó a responder:

- No me jodas, haceme el favor. Por lo menos no soy un ortiva como vos! Aceptá que tenés 20, no sos una cuarentona todavía...

Evidencias de que el fin se acerca

- "¿Viste que cuando pagamos la entrada del boliche nos dieron un papelito que dice consumición? Bueno, me lo guardé y le saqué 15 fotocopias color. Está noche nos tomamos todo el licor de banana con enegergizante que haya! A romperla!".

Te llevo en la sangre de mi corazón!/Síndrome Hiena Barrios

- Y vos Juan qué preferís, nene o nena?

- Y te digo la verdad Marta, yo prefiero nene...

- Por qué?

- Asi lo puedo llevar a la cancha viste! Así compartimos la pasión!

- Ahh y por qué más querés tener un nene?

- No se. Lo único que se me ocurre hacer cuando tenga un hijo es llevarlo a la cancha...

Territorios poco explorados

- Que linda que es esa remera de Manu Chao que tenés puesta! ¿Dónde la compraste?

- En el Unicenter. Igual no voy más a ese shoping, está lleno de negros!

Dicen que ahí duele un montón!

Viendo los tatuajes de Lucas, Marcos le preguntó:

- ¿Este corazón envuelto en una llamarada violeta y negra por qué te lo hiciste

- Por mi mamá, la vieja de mierda me vive cagando a pedos y no me la banco más, pero bue la vieja es la vieja viste!

- ¿Y este escudo verde y blanco?

- Es el escudo viejo de Laferrere, soy fanático mal. Igual no ganan ni de casualidad los hijos de puta, son todos unos perros!

- ¿Este es Bugs Bunny?

- Si, me acompañó toda la infancia, lo amo.

La impotencia y el viagra de ira

Raúl se sumergió en un sueño horrendo donde su hermano le aplicaba una llave de lucha libre inmovilizandoló por completo. En medio de la toma de pelea Raúl intentaba pegarle en la cabeza a su captor con el único brazo que le quedaba libre pero le resultaba imposible, era como pegarle a un bloque de algodón.

Al despertar Raúl fue directo a la pieza de su hermano que se encontraba en medio de un sueño profundo y le propinó una paliza indescriptible.

Su hermano agitado y dolorido por semejante sorpresa, le preguntó entre sollozos y quejas:

- ¿Por qué mierda hiciste eso pelotudo?

A lo que Raúl enojado respondió:

- Por hacerme sentir inferior hijo de puta!

Las teclas del piano

Víctor ingresó a la parrilla con una rápidez notable. Su estomago rugía como una adolescente frente a una tienda de ropas en rebaja.

- ¿Me darías un chori por favor? Pero con pan de hamburguesa.

El parrillero al notar el pedido inusual del cliente contestó:

- Si, no hay problema ¿Te gusta más con ese pan?

A lo que Víctor respondió con con una sonrisa vacía:

- No, es por que tengo un solo diente.